En la mayoría de gimnasios habrás notado que hombres y mujeres suelen ocupar diferentes áreas del gimnasio, con tendencia a entrenar de manera diferente. Las mujeres suelen hacerlo en las cintas de correr y los hombres dominan el hierro en el área de pesas ¿Pero por qué es esto?
¿Deberían hombres y mujeres entrenar igual? ¿Deberían las mujeres hacer peso muerto y los hombres la elíptica?
Supongo que es comprensible, los hombres y las mujeres quieren resultados diferentes, la mayoría de los hombres tienden a empezar en el gimnasio para volverse más grandes y fuertes, mientras que la mayoría de las mujeres quieren perder peso, tener un vientre plano y/o un trasero más grande.
Sin embargo, ambos tienen una cosa en común: quieren que su físico combine con lo que esté de moda. Al ser la generación que creció viendo a Arnold Schwarzenegger, su apariencia se convirtió en el nuevo idealismo popular para los hombres. Su imagen luego influyó en otros medios, redes sociales y videos musicales. Con las mujeres, puede ser un poco diferente.
Las mujeres tienden a desear el cuerpo que aparece en la portada de las revistas, pero la persona que aparece en la portada tiende a cambiar mucho más. En la mayoría de los programas de televisión o películas, a las mujeres hermosas parece encantarles salir a correr, a clases de spinning o cualquier actividad de alta intensidad, lo que influye en las mujeres para que crean que esta es la mejor manera de obtener el mismo cuerpo ideal.
Además, ¿por qué querrían hacer ejercicio igual que los hombres? Los medios muestran que quienes usan pesas tienden a ser grandes y voluminosos, entonces, ¿por qué estaría mal?
Aunque hombres y mujeres son fisiológicamente diferentes, su respuesta al entrenamiento de resistencia y al levantamiento de pesas es muy similar . El entrenamiento de resistencia, entre todos los géneros, promoverá la masa muscular magra, aumentará el rendimiento mental, mejorará la densidad ósea y, en general, aumentará la salud general de una persona. Sin embargo, existe un mito muy común sobre el entrenamiento con pesas entre las mujeres que las hará «grandes y voluminosas», un mito que debe disiparse dentro de la comunidad de gimnasios.
Diferencias
La principal diferencia entre hombres y mujeres es que los hombres tienden a ganar más tamaño que las mujeres, esto se debe a que las mujeres contienen aproximadamente el 10% de la testosterona total en comparación con los hombres.
La testosterona se une a los receptores en la superficie del músculo y estimula la síntesis de proteínas para desarrollar músculo durante el entrenamiento de resistencia, así como aumentar los niveles de la hormona del crecimiento, lo que ayuda a los hombres a ganar mucho más tamaño mediante el entrenamiento de resistencia que las mujeres.
Las mujeres, por otro lado, no tienen esta testosterona presente de forma natural en sus cuerpos, por lo que sólo desarrollarán tono, fuerza y definición muscular, no necesariamente tamaño. Además, como mujer, si comes con un déficit calórico, tendrás dificultades para conseguir una imagen grande y voluminosa.
Algunos objetivos coinciden, pero siempre hay un énfasis predominante en el levantamiento de pesas y el entrenamiento de resistencia en lugar del uso de máquinas cardiovasculares, incluso para perder peso. Hay innumerables estudios que respaldan el entrenamiento de resistencia con la pérdida de peso, y creo que deberíamos seguir la evidencia científica sobre el cuidado del cuerpo en lugar de centrarnos en cualquier dieta de moda que muestren los medios.
El entrenamiento siempre debe adaptarse a los objetivos de salud y rendimiento de una persona, ya sea perder o ganar peso, estar un poco más saludable o entrenar para un evento o deporte competitivo. El protocolo de entrenamiento de una persona siempre debe adaptarse a esa persona, en relación con los ejercicios típicos que hacen hombres y mujeres en el gimnasio. A algunos simplemente les encanta despertarse por la mañana y salir a correr. La gente debería hacer lo que ama, cualquier ejercicio es mejor que nada de ejercicio.
Para responder a la pregunta planteada en el título, ¿deberían hombres y mujeres entrenar igual? Sí, deberían. Las mujeres obtendrán un beneficio sustancial de un protocolo de entrenamiento equilibrado que priorice el entrenamiento con pesas y la fuerza y no deberían temer volverse «demasiado grandes o voluminosas».
