Una de las partes más propensas a lesiones dentro de nuestro organismo y que más castigo sufren cuando entrenamos en casa, son las articulaciones. Cuidar las articulaciones es importante a la hora de querer incorporar el deporte como dinámica de vida, puesto a que si no escuchamos y no cuidamos a nuestras articulaciones correremos serios riesgos de lesionarnos.
Este tipo de lesiones suelen venir acompañadas de inflamación y dolor, por lo que aquellos que practicamos ejercicio en casa nos vemos obligados a interrumpir nuestras rutinas de entrenamiento para lograr una óptima recuperación.
Uno de los principios básicos para evitar daños, es cuidar nuestra alimentación. En este sentido, os vamos dar una serie de alimentos importantes para mantener saludables nuestras articulaciones.
Cebolla y hortalizas similares
La cebolla, los ajos, los puerros, los espárragos y las coles tienen un alto nivel de azufre que nos permite que tengamos unos niveles de colágeno elevados en el cuerpo que nos ayudan a cuidar las articulaciones.
Pescado azul
Las sardinas, el cartílago de tiburón, el salmón y atún suponen la fuente básica que nos ayuda a genera omega-3. Son un potente anti inflamatorio, y nos ayudan a las a hacer frente a los procesos de oxidación que conlleva el ejercicio físico. El ácido de omega-3 también está presente en los frutos secos y en las semillas.
La carne
Incluir todo tipo de carne en nuestra dieta es fundamental por su alto contenido en proteínas y en minerales, como el zinc o el hierro. Todos ellos favorecen a la prevención y la reducción de los plazos de recuperación en una lesión.
Vitamina C
Las naranjas, fresas o verduras como el pimiento y el tomate nos sirven también, para rebajar y prevenir la inflamación aportando una buena cantidad de Vitamina C. Este tipo de alimentos permiten que nuestro organismo mantenga los niveles óptimos de colágeno.
Agua
El líquido sinovial es el elemento imprescindible para que la fricción que se produce con cada movimiento entre los cartílagos y otros tejidos sea la menor posible y evitar así, lesionarnos. Es uno de los mejores métodos para mantener una correcta lubricación que nos permitirá cuidar las articulaciones.
También podemos echar mano de las bebidas isotónicas. Y aunque es un tópico, la recomendación general está centrada en la ingesta de 2 litros de agua al día como mínimo.