Perder barriga, es un término que se emplea coloquialmente para hacer alusión a adelgazar/perder peso. Hay mucha obsesión últimamente con conseguir perder barriga en un plazo de tiempo muy reducido. El sistema en el que vivimos, premia el aspecto físico por delante de otros muchos valores, por lo que la gente pierde la cabeza por intentar bajar de peso a una velocidad espectacular.
Es triste que el aspecto físico tenga tanta relevancia, lo digo a título personal y como reflexión en alto. El hecho de querer perder barriga, a parte de ser algo bueno para la salud, lo que realmente hace que la mayoría de las personas tenga tanta premura por hacerlo, es una mejoría en su aspecto estético.
Es un refuerzo emocional el sentirse atractivo, retroalimentado por los patrones estéticos que nos inculca nuestra sociedad, así como el de nuestro entorno cercano con dichos como, «¿has adelgazado?Qué guapo/a estás». O en sentido negativo, «¿has ganado peso?» precedido con un silencio poco alentador y que suele ser más expresivo que cualquier posible frase.
Y diréis, ¿qué tiene que ver esto con perder barriga? Tiene que ver más con el tiempo en conseguirlo y el trasfondo subyacente. Adelgazar en una semana se puede, incluso a veces es importante. Los atletas de élite, realizan dietas de choque para bajar 3 kilos en semana y media para encajar en el peso de competición (por razones relativas a que es mejor entrenar con más kilos con los que vas a competir) y no es un atentado a la salud.
Al principio, el cuerpo es capaz de perder peso rápidamente, al quitarse de líquidos y otros residuos acumulados fácilmente acumulados. No obstante, que se pueda conseguir, no significa que se pueda hacer de cualquier manera.
Muchas dietas adecuadamente diseñadas, están bien estrucutradas para que esto se pueda conseguir. Con esto digo, que antes de hacer el suicida cuando queramos perder barriga, no recortemos una cantidad de calorías desmesuradas sin sentido y sin un patrón lógico. Las cosas, hay que hacerlas bien, y no basta con seguir la dieta del vecino o la vecina.
Los objetivos bien planificados y planteados, suelen dar resultados a largo plazo y de forma permanente. Seguro, que todo el mundo quiere perder barriga y no recuperarla nunca. Ése es realmente el objetivo, y lo complicado. Habréis oído que lo difícil es mantenerse en el peso, no perderlo.
Es loable y respetable que se quiera perder barriga rápidamente. Sólo os insto a que seamos un poco astutos y no cometamos los errores que mucha gente comete una y otra vez.
Que nuestras ansias por conseguir determinados objetivos estéticos, no nos anulen y nos hagan adquirir unas desmesuradas ganas por adelgazar a toda costa con productos carísimos y soluciones extremas.
Fortalecer nuestro amor propio y autoestima, a menudo, será un aliado mucho más fuerte que el mejor de los termogénicos a la hora de perder barriga a largo plazo. No todo vale, y no me parece (ni nunca me lo ha parecido), vender una información extremadamente sensacionalista con el fin de captar más seguidores a costa de su salud física.
Por tanto, os dejo este interesante vídeo que pueda ayudaros a cultivar vuestro amor propio a la hora de mejorar vuestra autoestima y vuestros planes y programas para perder barriga:
