Aunque resulte paradójico y no normal, estoy convencido de que muchos y muchas de vosotros/as os habéis preguntado la dificultad que existe a la hora de perder peso y lo fácil que es volver a recuperar la cantidad de peso perdida.
Cuando nos ponemos a dieta, nos cuesta una barbaridad perder peso, con fuerza de voluntad y haciendo sacrificios para conseguir estar en forma, sin embargo, al poco de volver a a la normalidad vemos como recuperamos el peso perdido a una velocidad muy superior. ¿Será cuestión de percepción?
En este artículo, vamos a tratar sobre:
- Tratamiento general del asunto sobre perder peso
- Desgranamiento de cómo perdemos peso con ejercicio y con dieta
- Conclusiones generales sobre qué método para adelgazar es mejor, si el ejercicio o la dieta
Puede que la genética tenga que ver en la ecuación, pero la cuestión principal reside en controlar los hábitos alimenticios y de ejercicio físico. Y sino, vamos a demostrarlo con datos, para que quede mucho más claro todo.
Ejemplo
Para conseguir perder un kilo de peso tendremos que quemar sobre 7000 kilo calorías, una cantidad elevada. Para que el cambio sea evidente a nivel físico, debemos perder sobre 3-6 kilos, que aplicando los cálculos anteriores, nos daremos cuenta que es un total de 20.000-35.000 kcal.
Si al realizar un entrenamiento intenso conseguimos quemar sobre 500-700 calorías, y tenemos en cuenta la parte alta del intervalo, nos damos cuenta que necesitaremos un total de 30-50 sesiones para conseguir eliminar esa cantidad.
No obstante, para perder peso gracias a la dieta, todo se torna más sencillo. Simplemente con restringir 500 kcal a diario, lo que hará es duplicar la velocidad a la que vamos a conseguir quemar la cantidad de kilos que necesitamos.
Ahora vayamos al otro extremo, hemos perdido la barriga y la recuperamos en poco tiempo, ¿por qué?.
Simplemente con comernos un par de trozos de tarta de chocolate de más ya tenemos 700 kcal de sobra en el cuerpo en un abrir y cerrar de ojos. Al día siguiente no habrá tarta pero puede ser que nos pasemos con la cena, al otro día con el alcohol, y así constantemnete.
Nos cuesta mucho esfuerzo y sudor perder calorías y sin embargo nos es placentero y muy rápido ganarlas comiendo en exceso y no haciendo ejercicio. De ahí que los extremos sean tan diferentes. Básicamente, nos debemos centrar en cambiar hábitos alimenticios y apoyarlo con el ejercicio, pues la alimentación es mucho más importante que el ejercicio a la hora de perder peso.
