Parece ser, que en los últimos tiempos, hay dudas sobre si el método Weider es más o menos efectivo que el sistema full body a la hora de conseguir resultados. Lo cierto es, que cada sistema tiene un enfoque bien diferente, y que aunque pueden servir para ayudarnos a conseguir objetivos similares, tienen sus aspectos diferenciados.Puede que nos genere cierta confusión sobre el tipo de rutina que se puede adaptar mejor a nuestros objetivos. Y más, teniendo en cuenta que en los últimos años, parece que diferentes paradigmas deportivos han entrado en una enconada guerra, agudizada sin duda por el efecto de las redes sociales. Para echaros una mano, quiero explicaros en qué consiste la rutina Weider y la Full body, dejando en cada una de las mismas un vídeo de figuras relevantes en el ámbito del deporte.
¿Por qué entrenar sistemas compuestos?
Los sistemas compuestos de entrenamiento, como la rutina Full body o la torso-pierna, se basan en trabajar los músculos con ejercicios compuestos, mezclándolos en un mismo día. La full body, se caracteriza por incluir ejercicios que recluten fibras musculares de todas las partes del cuerpo en una única sesión. Un ejemplo de full body, sería trabajar en un día «únicamente» sentadillas, press de banca y peso muerto.
Se caracterizan, por trabajar con un menor volumen y mayor intensidad. Es decir, con menos ejercicios y repeticiones, reclutan muchas más fibras musculares a nivel comparativo. Trata de trabajar de manera más óptima con ejercicios compuestos, dejando en un segundo lugar el volumen de entrenamiento, tratando de optimizar al máximo el esfuerzo aplicado.
Aquí tenemos a David Marchante, Powerexplosive, que os explica las razones por las cuales considera que los entrenamientos compuestos son más efectivos que la rutina tipo Weider:
¿Por qué entrenar Weider?
Por otro lado, las rutinas Weider, se basan en trabajar cada grupo muscular de manera aislada. Pero, ésa es al menos la interpretación mundana que se suele realizar de este sistema, ya que como expliqué en este artículo, tiene diferentes metodologías diferentes que se pueden aplicar.
Las ventajas de este sistema, es que permiten trabajar con más fuerza y energía cada uno de los grupos musculares aisladamente. Al trabajar el bíceps, se le puede dar una mayor cantidad de trabajo, ya que no lo interferimos con ejercicios de otros grupos musculares.
Os dejo un vídeo de Tarrako, el cual os explica las razones por las cuales él prefiere Weider:
Conclusiones
Como suele ocurrir en este tipo de asuntos, no hay una verdad absoluta sobre el tema. Cada persona, en base a sus objetivos y capacidades físicas, sacará más o menos rendimiento a cada una de estas estrategias deportivas. No hay un método universal, aunque a mi modo de ver las cosas, considero que las rutinas compuestas son más efectivas para personas naturales.
Pero, no significa que la rutina Weider no sirva para nada, en absoluto. Conozco a personas naturales, a las cuales este tipo de rutinas les va de maravilla, ya que por sus capacidades físicas, por la alimentación que llevan y el descanso, sacan el máximo provecho a todo el volumen de la Weider. Y en personas que consumen sustancias anabolizantes, una rutina Weider de cara a hipertrofiar, puede ser bastante más efectiva que una fullbody ya que el cuerpo es capaz de asimilar mucha mayor capacidad de trabajo.