¿Es posible adelgazar 20 kilos?¿Es saludable hacerlo en espacio corto de tiempo?¿Qué efectos puede tener sobre nuestra salud el perder tanto peso a corto plazo?¿Qué mejoras puede reportarnos esto a nuestra salud física? Entre otras, estas son muchas de las cuestiones que nos planteamos cuando queremos tratar de encontrar cuál es la mejor manera de adelgazar 20 kilos rápidamente.
Antes de nada, ¿se puede conseguir? Sí, pero como todo en este mundillo, es una pregunta muy relativa y que depende bastante de la persona. Claro, un sujeto que pese 150 kg puede adelgazar 20 kilos en un espacio corto de tiempo, ya que se pierde peso de forma proporcional al peso restante que tenemos.
No es que se pueda dilucidar a través de una fórmula matemática que nos diga exactamente cuánto vamos a perder a razón de nuestro peso, pero lo que es claro y seguro es que hay una fuerte relación entre el peso que nos sobra y la cantidad de kilos que se pueden perder.
Como suelo insistir en este asunto, no recomiendo adelgazar una gran cantidad de peso de forma rápida, salvo en casos de extremo sobrepeso. Es decir, que alguien que le sobre poco peso, no es para nada recomendado que consiga adelgazar 20 kilos en un mes, de hecho es una auténtica atrocidad que conllevará, sin lugar a dudas problemas de salud relacionados.
Como todo en el deporte, las cosas se deben hacer despacio y de forma controlada. Los resultados consiguen llegar con el tiempo y es perfectamente asumible conseguir poder adelgazar 20 kilos en un plazo de 9-12 meses, tratando de que dicha caída sea paulatina y moderada.
Pero, a aquellos que estéis dispuestos a quemar todas vuestras naves para conseguir perder una cantidad absurda de peso en poco tiempo, lo único que obtendréis a la larga será un rebote de peso bestial, sumado al hecho de que durante el proceso de pérdida-ganancia de peso, hayáis ganado grasa y perdido masa muscular.
Aunque nos lleve más de un año, es preferible que la pérdida de peso sea sostenible y se pueda mantener a lo largo del tiempo, antes que hacer locuras que nos pueda pasar factura a nuestra salud a corto-medio-largo plazo.
